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Ese día empezaba la segunda semana del mes de junio: primavera madura el verano es. Los exámenes del fin de curso estaban por iniciar. Todos nos sentíamos muy felices y las preguntas más sonadas en el entorno escolar eran: ¿Quién se sacará el premio en la rifa? ¿Habremos aprobado el curso y pasado de año? ¿A dónde irás de vacaciones?
__Mi papá dice que iremos a visitar a su mama, o sea a mi abuela Ágata, a quien no le gusta que le digan abuegata y pide que de cariño le digamos: abueguita.
__Más te vale haber pasado de año, porque sólo los burros reprueban y tú eres un gatito…
__Yo, yo me sacaré el premio en el sorteo.
__No, yo…
Andando el camino de la escuela nuestro personaje se encontraría sin saberlo en aquel crucero de la vida, en donde su historia personal y aquellos tiempos en la frontera del Río Grande con el Río Bravo, se trenzarían íntimamente para siempre con los elementos de la fantasía que hoy aquí les cuento en este libro.
¿Por qué nuestro héroe el pequeño F.F. siempre concebía toda negativa como afirmación? No lo sabía. Pues el mandato de casa: “No vayas jugando por la calle”, él siempre lo interpretaba como: “Juega, felino: juega feliz”. Caty le decía “Un día te vas a meter en problemas”, Caty era su mamá –se llamaba Catalina- y Doble efe no entendía el porqué cuando venían sus primos de Estados Unidos le decían a ella: Miss Cat…
__¿Mis Cat?
__Sí, qué raro ¿verdad?
__¿No será que así se dice en Inglés, Micifuzy?
__!Quién sabe!
Pero estábamos en que Feliciano Félix -que era como a él le gustaba llamarse, igual que su papá Feliciano y que su abuelo Félix y a quien nosotros aquí llamaremos simplemente Doble efe-, iba jugando por la calle con sus amigos en la banqueta rumbo a la escuela cuando las monedas con la que iban jugueteando:
¿Águila o Gato…?
¡Águila!
¿Gato o Águila…?
¡Gato!
se le fueron rueda que te rueda rodando las monedas por la banqueta hasta caer y desaparecer por la rejilla del alcantarillado del drenaje pluvial. Así fue como se despidió de aquel dinero que se fue rodando… mientras él pensaba en lo que decía su madre: “Un día te vas a meter en problemas…” pero sin acordarse que esas monedas que perdía eran para pagar la cuota del grupo del mes de junio en ese día lunes
Documentar el Calendario de Exámenes. Así decía en la pizarra externa del salón en donde también habían dibujado unas golondrinas con su veraniego color negro y amarillo como señal de vuelo, o sea: el adiós de ese fin de grado y del ciclo escolar.
Lunes Aritmética. Cuenta el que cuenta. Mis primeras cuentas claras.
Martes Naturales, Gatografía e Historia. Dónde, Quién y Desde Cuando.
Miércoles Sociales y Lengua Nacional. Primeras Letras, Lectura de Comprensión
Jueves Artísticas: Música Teatro Danza Dibujo y Pintura Los gatos se pintan solos
Viernes Diplomas, Ceremonial Oficial Exposición y Convivio. Las golondrinas.
En esas estábamos leyendo cuando sonó la campana, anunciándonos el inicio de la jornada escolar y cada uno de nosotros fue a su grupo: Primero A, Segundo B, Tercero C… ¡Un día él lograré llegar al grado Z en la Universidad…! Pensaba ilusionado F.F. mientras entraba a su salón.
(Continuará…)
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